Juan Carlos Romero, el senador salteño conocido por su alineación con el gobierno de Javier Milei, sorprendió a todos al apoyar abiertamente a los gobernadores en su reclamo por más fondos federales. En un inesperado giro, Romero respaldó el pedido de coparticipación de impuestos a los combustibles y los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), una medida que inyectaría billones a las provincias en crisis.
¿Por qué este cambio? Mientras Milei tilda el reclamo de "ataque al ajuste", Romero dio un paso del costado libertario y se sumó al coro de gobernadores peronistas. En redes, confirmó su apoyo, generando un terremoto político. ¿Simple pragmatismo o el inicio de una reconversión ideológica?
Los rumores crecen
¿Vuelta al PJ? Analistas sugieren que Romero estaría evaluando un retorno al Partido Justicialista, especialmente si el peronismo tradicional busca renovarse tras las elecciones en Buenos Aires. Su movimiento coincide con el malestar interno contra Cristina Fernández y la búsqueda de un "peronismo con gestión".
Al apoyar a los gobernadores, Romero se acerca al ala federalista del PJ, distanciándose de La Libertad Avanza. Este giro podría costarle su lugar en la coalición oficialista, pero le abriría puertas en un peronismo hambriento de liderazgos alternativos.
¿Qué viene ahora? La pulseada entre provincias y Nación define no solo fondos, sino futuras alianzas. Si el PJ capitaliza el descontento, Romero podría emerger como una figura clave. Mientras, Milei enfrenta otra fisura en su base. La política argentina, una vez más, promete fuego.